La dinastía Mike Krzyzewsky ya tenía fecha de caducidad, pero por si acaso quedaba alguna duda contractual, ya no hay vuelta atrás. Cuando finalicen los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, Gregg Popovich se hará cargo del Team USA (2017-2020). El tiempo ha pasado rápido para 'Coach K'. Han sido 10 años en su segunda etapa al frente del seleccionado en los que Estados Unidos ha logrado muchos éxitos deportivos (dos medallas de oro en Juegos Olímpicos; dos preseas de oro y una de bronce en Mundiales). Pero por encima de todo se ha logrado el objetivo de implantar una cultura, una manera de hacer las cosas, desde la mera institución, las infraestructuras a los métodos, estrategias y reclutamiento de jugadores.
Después de que 'Coach K' amagara con dejar de ser
seleccionador de EEUU en febrero de 2013, finalmente optó por continuar en el
cargo hasta después de Río. La decisión estaba tomada y ya solo quedaba buscar
un candidato. Jerry Colangelo, director de 'USA Basketball', era consciente de
que no había otra opción viable para sustituir al anterior entrenador que
Popovich. Lo sabía él, lo sabían los jugadores e incluso los aficionados y
expertos de baloncesto.
¿Quién debería ser el próximo coach del Team USA? Popovich
hubiera salido vencedor en las quinielas.
"Estoy más que
emocionado por llevar a cabo la responsabilidad. Es algo que no me
esperaba", afirmó el también entrenador de San Antonio Spurs.
"Tengo la responsabilidad de seguir con lo establecido".
Colangelo le llamó por teléfono pocos días después de que
los Spurs cayeran eliminados en la primera ronda de los playoffs ante Los
Angeles Clippers. Le ofreció el puesto y le dio todo el verano para que se lo
pensara. Finalmente, antes del comienzo de la nueva temporada de la NBA, 'Pop'
accedió a convertirse en el nuevo seleccionador del Team USA.
"No sería
honesto si diría que no cruzó mi mente. Todo el mundo lo pensaría como
aspiración", señaló. "Es una experiencia dignificante en muchos
aspectos. No era algo que me esperara pero me entusiasmé cuando me preguntó.
Estoy preparado para el reto. Quiero mantener con honor todo lo que Mike
(Krzyzewsky) y los demás han hecho en esta década y los que fueron parte de
esta cultura. Tengo la responsabilidad de seguir lo que construyeron".
Cinco anillos de la NBA ayudan, también su capacidad de
amoldar su propia cultura a la de su predecesor. Aunque Popovich ya haya pasado
por la selección como asistente en el FIBA Americas de 2002, el de 2003 y los
Juegos Olímpicos de 2004, no está acostumbrado a firmar parte de proyectos
ajenos. En aquella ocasión las cosas no le salieron lo bien que hubiera
deseado, la estructura no era la idónea según su punto de vista y la medalla de
bronce en Atenas no fue del agrado de nadie. 'Pop', o se amolda a la excelencia
o él mismo la crea. La creo en los Spurs y ahora está dispuesto a agarrar el
testigo de lo que considera un buen proyecto, mucho mejor que el de hace 13
años.
"He visto
cambios estructurales. La infraestructura ha encontrado el sitio en el que
permite que se cree una cultura. Eso no existía, pero ahora después de una
década va adelante. Los jugadores saben que es una buena manera de
desarrollarse. Y las familias y la gente estará orgullosa de ellos", argumentó.
Para Colangelo no había otra opción. Su lógica, y de tanta
gente, apuntaba a Popovich como la mejor opción. Su trato a los jugadores, su
manera de hacer las cosas, todo cuenta para tenerle a bordo.
"No había una
lista de gente para elegir. Era el hombre que quería era 'Pop' después de que
Mike termine sus 10 años. Representa lo que es necesario para el basquetbol en
EEUU, entiende el baloncesto internacional, pasó tiempo como militar y es un
ganador", señaló el director de 'USA Basketball'.
Qué más ingredientes hacen falta para servir una ración de
baloncesto de elite. Qué jugador se va a negar a formar parte de los elegidos
de Popovich. Que tiemble el mundo, porque después de Río llegará un coach que
pondrá una piedra más para erigirse como uno de los mejores entrenadores de la
historia.
Vía: Gonzalo Aguirregomezcorta/ESPN
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